Atendiendo a la inmediatez del titular y buscando la mínima expresión descriptiva me siento tentado a veces en dar matarile a la ingratas primeras líneas con un simple adjetivo, esos primeros trazos a veces dubitativos suelen ser los mas difíciles, principalmente por ser los encargados de destrozar la suave paz del folio en blanco. Podría instalar por una vez lo barroco de mi prosa en la sencillez del trazado fino, pero muy señores/as míos sería injusto con ustedes, conmigo y con los artífices de este maravilloso disco si únicamente ajustase esta breve crónica a lo telegráfico de un parafraseado más o menos acertado que perfectamente podría describir esta minúscula obra de arte, esta pequeña porción de finísima sensibilidad que además tiene detrás un interesante trasfondo social al que a continuación dedicaremos parte de nuestro tiempo, si ustedes me lo permiten.
El día uno del pasado mes de Mayo, unas devastadoras inundaciones motivadas por la crecida del rio "Cumberland" arrasaron todo lo que encontraron a su paso en la bonita ciudad de Nashville, Mike Farris natural del estado de Tennessee decidió entonces reunir a un nutrido grupo de amigos y músicos para así aliviar en la medida de lo posible el sufrimiento de los afectados, según palabras de Mr.Farris "Se trata de devolver y revivir el orgullo de la ciudad". Los beneficios derivados de la venta de dicho ep serán destinados al Memorial Rose Found & The Community Foundation para ayudar a los damnificados. Grabado en directo en el centro de la Iglesia Presbiteriana de Nashville el pasado 27 de mayo -tan solo un mes después de la inundación- se trata de un breve aunque sensacional recorrido por la tradicionalidad musical americana, folk, blues, country y gospel son en manos de Farris & Cia un delicioso y reconfortante bálsamo -que una vez mas y mientras esperamos su inminente nuevo álbum- sirve para llenar los espacios perdidos entre el alma y el corazón.
Hace unos días en este mismo sitio nos hacíamos eco del inolvidable concierto que Mr. Farris ofreció por tierras valencianas en el marco de su gira española, así que esta vez no pondré el acento en describir para quien no lo sepa quién es Mike Farris, utilizare ese tiempo en citar algunos de los participantes en tan emocionante velada, a saber... Sam Bush, Kenny Vaughan (Marty Stuart), Gill Landry (Old Crow Medicine Show), Byron House (Robert Plant), además de Regina y Alfreda McCrary (The McCrary Sisters), Derrek Phillips y Eric Holt miembros de la banda que siempre le acompaña, la fenomenal Roseland Rhythm Revue, formación con la que se presento el pasado día quince en la sala Durango Rock Club en una velada que como apuntaba al inicio de este párrafo aun resuena en nuestros pabellones auditivos.
Una nueva lección de sonidos enraizados en la cultural musical americana de preguerra, un intervalo en lo musical por el que Farris siempre ha confesado sentirse tremendamente atraído, aunque esta vez el blues adquiere una presencia más pronunciada, los seis cortes que dan vida a este ep solidario siguen destilando la intangible espiritualidad del gospel y el soul, cinco versiones de clásicos del cancionero popular y religioso más un nuevo tema -"Dear lazarus"- posible adelanto de su inminente nuevo álbum "Already Alright". Así podemos disfrutar de "celestiales" momentos como “Wrapped Up, Tangled Up” una oración musitada del estilo del Reverendo Jackson, o saborear las fragancias de New Orleans en “Down Let the Sun Go Down”. El blues añejo de “Mother Earth”, "Down on me" o la inicial "The night the cumberland came alive" completan el listado de este soberbio disco, un trabajo concebido desde la pureza más absoluta y que destila ese tipo de sinergias que algunas veces habitan algunos pequeños rincones y cuya ultima descripción dejo nuevamente en boca de Mike Farris que hace unos días declaraba...
"Antes de las trombas de agua, nos dedicamos a la noble búsqueda de canciones que pudiesen evocar la lucha y la victoria de la clase obrera, un sonido que surgiera de la carne y del espíritu. Pero después, la ciudad se vio inundada por las trombas de agua y este sonido se mezcló con el de la resurrección de la ciudad. Cuando nos reunimos en una histórica iglesia de la ciudad, lo que sucedió fue más allá de nuestra imaginación”.
1 comentarios:
joder, Farris no solo es un musicazo de los pies a la cabeza, ademas un tio con un corazon enorme, por lo que he leido su gira por spain ha sido acojonante, lastima que no pasara por aqui cerca. Sobre esta grabacion, ando buscandola por ahi, porque tiene que ser gloria bendita
saludos master
Publicar un comentario